No tengo ganas de hacer nada. Sé que iré a la autoescuela y que luego iré a cenar fuera y hasta lo de ir a las clases me apetece, pero el trabajo… Tengo curro para parar un tren y tengo quinientas llamadas por hacer, pero mira que no me apetece. Las neuronas se me han puesto en huelga, así que para combatir este estado me he puesto a pensar. Maalooo.
Lo primero que se me ocurría se lo he ido diciendo por el yahoo a la Sufumu. ¿Sabes qué me gustaría hacer? Coger cinta aislante y un pañuelo de papel. Me pongo la cinta aislante con el papel tapando justo la mitad de la cara. La cara que me queda libre me la maquillo con pestañas postizas y todo y la otra no y luego me quito el papel. ¿Oye tienes cinta aislante? Nada que no tenía y no me quería dejar ni celo.
Entonces como seguía aburrida he cogido mi mesa y la he empujado como tres palmos hacia delante. Me he hecho daño en la rodilla y todo. También la mesa auxiliar y la silla y las papeleras. Antes de mover todo el mobiliario si quería ver a Sufumu me tenía que asomar. Me he puesto a contemplarla trabajando, pero como ella no me miraba me seguía aburriendo y no se me han pegado las ganas de currar, así que la llamaba por teléfono para que ella me mirara también a ver si así era más divertido.
Se ha escandalizado cuando ha visto el corrimiento de muebles y quería que lo volviera a colocar todo en su sitio (a si se va a caer alguien niña échalo pa tras). No, niña que quiero verte. Entonces ya no me miraba. Para que lo hiciera la mandaba algún mensaje misterioso y cuando se giraba me veía limándome las uñas, al rato cuando se giraba estaba con un libro de cómics, al rato simplemente me pillaba mirándola. Pero me he vuelto a aburrir. Aprovechando el momento de calma, me he dicho venga a ver si escribes algo. Pero nada, que no me sale nada… solo el aburrimiento.
Así que vuelvo a mirar pa la Sufu ahora que puedo y le debo a haber pegado mi estado porque mira la pantalla fijamente y se toca las puntas del pelo. A ver qué hace… Caracolillos en el pelo. Creo que también se está aburriendo. Me la voy a coger por banda y nos vamos a dar una vuelta a la manzana a ver si nos despejamos. Todo puede ser que acabemos en una terrazita con unas birritas frescas y que al final hasta pase de ir a la autoescuela. On vera!